El Día de los Muertos es más que una visita al cementerio para celebrar con las almas de los fallecidos su paso a más allá, implica un continuar unas costumbres que vienen de hace más de dos siglos. Significa también compartir con los familiares las historias de aquellos que ya no están y hacer sus trayectos hacia el otro mundo más placentero. Es una mezcla entre lo pagano y lo cristiano, entre las creencias de los indios y las tradiciones católicas de nuestros antepasados.
Más abajo nos referimos al Día de los Muertos, ponemos un ejemplo de unas calaveras literarias mejicanas, y ampliamos sobre festividades similares en Belice y en Salta, en el norte de Argentina.